martes, 15 de mayo de 2012

Noches de Cabaret reloaded



Cuando por primera vez tuvimos oportunidad de ver las Noches de Cabaret con Lucía Méndez, fue en la primavera de 1990 en el desaparecido centro nocturno El Patio, en la calle de Atenas 9, donde por seis meses, de miércoles a domingo el público abarrotaba el lugar para ovacionar a su estrella.
Siguió una gira internacional por cuatro meses para a fin de 1991, cerrar el ciclo con broche de oro en una triunfal temporada de dos meses en el Teatro Blanquita con dos funciones diarias de martes a domingo.
Este evento fue el parteaguas en la carrera de Lucía ya que además del sketch de muy buen gusto con travestis caracterizados como cada uno de los personajes de sus telenovelas, la diva presentó el controvertido sketch de La Meneada, donde supuestamente era invitada a un programa de televisión y la anfitriona era una enana.
Se rumoró que la conductora a quien la diva supuestamente hacía alusión en el sketch, se quejó con los altos mandos de la empresa alegando que no sólo se burlaba de ella a nivel personal, sino de un producto de la empresa como lo era su exitoso programa televisivo.
Se dijo que esto bastó para que al estar protagonizando la telenovela Marielena en Telemundo, y la empresa adquirir en Estados Unidos la cadena televisiva de la competencia, Lucía automáticamente quedó fuera de sus filas, maracando su carrera para siempre.
Tuvimos oportunidad de presenciar las Noches de Cabaret originales en El Patio, en el Teatro Blanquita, en Monterrey, Saltillo, San Antonio, dos veces en Laredo, Texas, porque sí, Lucía llenaba a reventar todos los locales donde se presentaba y en nuestro pueblo se presentó dos noches seguidas, algo inédito entonces.
Jamás imaginamos que 21 años después el espectáculo renovado seguiría dando de qué hablar y de qué forma.
En junio de 2011 fuimos testigos en dos ocasiones más del resurgimiento desde las cenizas del polémico show, esta vez en el Babilonia Show Center, lo que un día fue el Jubilée, la disco donde Luis Miguel grabó su video ochentero Palabra de honor teniendo como modelo a Adela Noriega.
Todo estuvo espléndido y glamouroso, pero creemos que el sketch con los travestis estuvo un poco pasado de tono rayando en el mal gusto, concesiones que su consorte y productor de los 90s jamás habría permitido.
Fue ése el único pero que le pusimos porque fuera de ahí lo encontramos fresco y renovado, un marco espléndido para una vez más ver triunfar a una gran estrella, porque reconozcamos que, aunque Lucía ha sido tachada de muchas cosas, ciertas o no todas ellas, no podemos negar que hoy por hoy es nuestra máxima estrella, insisto, nos guste o no.
El espectáculo del Babilonia daba para más y fue muy lamentable que terminara por un chisme-escándalo, de esos tan socorridos hoy día por la mala prensa y temimos que hasta ahí llegaría, pero una vez más comprobamos que a la Méndez lo que no la mata la fortalece.
En noviembre del año pasado abarrotó una única noche el Teatro Metropólitan y ella siguió insistiendo que habría gira para 2012 de lo que sus detractores entre colegas, público y malos periodistas se burlaban.
Por eso nos da mucho gusto volver a ver dos veces más a Lucía Méndez llenando teatros en su totalidad, en esta ocasión en el Teatro de la Ciudad de Piedras Negras, Coahuila.
De nueva cuenta reinventa el mismo concepto de sus Noches de Cabaret, esta vez escoltada por dos grandes voces como lo son Manoella Torres, a quien habíamos visto triunfar hacía apenas seis semanas en el Auditorio Nacional con las GranDiosas, y Rocío Banquells, a quien no habíamos tenido oportunidad de volver a ver en directo desde que se presentó con Evita en Nuevo Laredo en 1981.
Lo llamamos Noches de Cabaret reloaded porque fue lo que hizo Omar Suárez con nueve músicos (que incluyen cuatro metales, ¡gracias un millón, Omar!), cuatro coristas, ocho bailarines, varios acróbatas, y de manera inteligente suprimió la parodia de los travestis recargando el show musicalmente con dos grandes de la música que han triunfado cada una por su lado a la par de Lucía desde hace 40 años y nos entregan dos horas y media de éxitos salpicados de nostalgia.
Manoella nos regala varios de sus éxitos y la sorpresa fue Hoy lloré por ti, el que fuera el tercer sencillo de su LP Acéptame como soy en 1984.
Rocío Banquells por su parte, nos regaló varias sorpresas muy memorables destacando especialmente Con él, tema que en 1986 le fue vetado por la radio y la televisión por ser considerado muy fuerte al abordar el tema de un marido bisexual.
Lucía Leticia nos sorprente espléndidamente caracterizada como doña Leonor de Santiago, personaje de época de su telenovela El extraño retorno de Diana Salazar, con todo y caireles, ojos amarillos, acróbatas volando por los aires, fantasmas espantando al público, gemidos, gritos, susurros y mucho humo.
Y ¡qué final! fue un cúmulo de emociones ver a las tres artistas haciéndose mutuo homenaje en un memorable trío perfectamente acopladas y lo que es mejor, es tanto el éxito de la gira la cual estaba programada para cinco fechas, se ha extendido una semana más, señal de que de nuevo Lucía Méndez quien sigue siendo con frecuencia objeto de injustas burlas, no ocupa mente en eso y sigue triunfando junto con sus invitadas de honor.
Aunque es cierto que no es lo mismo los Tres mosqueteros que 20 años después, una vez que otra vez atestiguamos el éxito de un espectáculo que sigue dando para más, confirmando que como dice el tango, 20 años no es nada, mucho menos para Rocío Banquells, Manoella Torres, Lucía Méndez y su público, lo que nos llena de complicidad y nos hace un nuevo ente.

jueves, 19 de agosto de 2010

We are the world




La devastadora habruna provocada por la inclemente sequía que afectó por varios años al país africano de Etiopía dio pie para que, en enero de 1985 Michael Jackson (cuando vivía y era negro) y Lionel Richie compusieran una de las canciones más bellas con mensaje humanitario que jamás se hayan escrito, y convocaron a un grupo de entusiastas artistas, verdaderas estrellas, todos bajo la producción del talentosísimo Quincy Jones para agruparse con el nombre de USA for Africa (United Support of Artists for Africa) y grabar el tema We are the world, y me refiero a la versión original, no a la mamarrachada que sacaron a principio de este año, no cabe duda que segundas partes nunca fueron buenas.

La idea era comercializar un LP, video, libro, póster y camisetas (tuve la mía y su misteriosa desaparición ya saben a quién se la debo, madre, no sabes cuánto te lo agradezco) cuyas ganancias serían y fueron destinadas a apoyar a Etiopía, y el proyecto no tuvo éxito, sino que fue todo un suceso al lograr vender más de 20 millones de discos y recaudar más de 50 millones de dólares de entonces, que era la meta, y en lo que va de la historia casi se ha duplicado dicha cantidad.

Además del éxito monetario y humanitario del proyecto, la canción fue todo un éxito radial, ocupando el primer lugar de Billboard por varias semanas.

En total fueron 45 figurones quienes se reunieron y entre los que destacan quienes tuvieron líneas de solistas quienes en 1985 se encontraban en la cima del éxito como Lionel Richie, Stevie Wonder, Paul Simon, Kenny Rogers, James Ingram, Tina Turner, Billy Joel, Michael Jackson, Diana Ross, Dionne Warwick, Willie Nelson, Al Jarreau, Bruce Springsteen, Kenny Loggins, Steve Perry, Daryl Hall, Huey Lewis, Cyndi Lauper, Kim Carnes, Bob Dylan, Ray Charles y Jeffrey Osborne (mencionados en orden de aparición).

Jamás se supo de problemas entre ellos durante las grabaciones ni mucho menos de actitudes divistas, de que si yo solamente hago coros, o de que si fulano tiene más líneas solistas que yo, o por qué ella sí y yo no, tal y como sucedió cuando copiando una exitosa idea espontánea, meses después se reunieron los artistas hispanos para hacer lo propio resultando algo verdaderamente desastroso y de lo cual les escribiré en otra ocasión.

Haz click aquí para ver el video de la versión original de 1985.

lunes, 9 de agosto de 2010

Los blue jeans









Quien comenzara el desorden de poner su nombre a los pantalones de mezclilla o blue jeans, como se les llamaba entonces fue Gloria Vanderbilt a finales de los setenta y todas las niñas fresas algunas veces discretamente y otras no tanto competían entre ellas a ver quién tenía más pares. Era sólo el comienzo.

Creo que era 1980 cuando Calvin Klein lanzó una polémica campaña publicitaria teniendo como imagen a una Brooke Shields quinceañera quien posando de manera sensual nos seducía ingenuamente desde la televisión con el tan famoso slogan ochentero "you want to know what comes between me and my Calvins? Nothing” (¿Quieres saber qué hay entre mi y mis Calvins? Nada).

Debemos recordar que la carrera de Brooke Shields se caracterizó en sus inicios por atreverse a mostrar sólo un poco, como dando picones cuando todavía tenía los senos del tamaño de un durazno, y como muestra tenemos a la más que precoz The blue lagoon (Randal Kleiser, 1980) y a la cachonda Endless love (Franco Zeffirelli, 1981), así que una campaña publicitaria de unos inocentes pantalones vaqueros con unas poses sensualonas, no le venían nada mal, sin mencionar lo que le pagaron por ello.

Podría asegurar que esta campaña fue la primera en llevarse a cabo de una forma agresiva por vender pantalones vaqueros, utilizando a una figura protagónica entre los adolescentes, y que además de los spots televisivos se colocaron espectaculares en Times Square así como anuncios en revistas de la época.

Aquí puedes ver el video de dichos comerciales de la campaña.

Además de los Calvins, con le tiempo comenzaron a ponerse de moda otras marcas, las cuales se caracterizaban por estilizar un poco los tradicionales pantalones vaqueros Levis, Lee y Wrangler hasta entonces conocidos y cuyo propósito original era para que soportaran la carga de las duras jornadas de trabajo duro de los obreros norteamericanos.

La estilización consistía en hacer la mezclilla menos dura, un poco más delgada, ponerles costuras en los costados de las piernas, lo que le daba un toque más nice al pantalón, y algunos de ellos bordaban en la bolsita para llaves sobre la bolsa delantera derecha, el logo de la marca, lo que le daba cierto caché, sin restarle importancia al llamativo bordado de las bolsas traseras.

Ni como olvidar a los famosos Jordache o a los Sergio Valente, los más vaquerones de todos, y entonces los jeans de diseñador eran un must entre la raza para ir al cine, a guerrerear o a la Placita Longoria.

Si por lo menos no fuiste el feliz poseedor de un par de vaqueros de diseñador mencionados en éste artículo, no puedes presumir de haber gozado la maravillosa década de los ochentas.

domingo, 1 de agosto de 2010

El pequeño panda de Chapultepec



Tras demagógico sloganuna expresión de amor vale más de mil palabras”, resumían lo que para el pueblo mexicano representaba el nacimiento del primer oso panda nacido en cautiverio allá en el verano de 1981.

El país pasaba por una situación muy difícil, el peso se desplomaba en caída libre, lo que llevaría poco más de un año después a la nacionalización de la banca y con ello al control de cambios, haciendo los dólares un producto de mercado negro literalmente.

Que si campañas publicitarias de las empresas colgándose del pandita, y cuando todo mundo creía que se iba a llamar Cancun, nos salen con la macrojalada de convocar a un concurso a nivel nacional para ponerle nombre al hijo de Pe-Pe y Ying-Ying, los pandas gigantes a quienes les dio por darle vuelo a la pasión y eran huéspedes distinguidos del zoologico de Chapultepec entonces al mando de la polémica Dra. María Elena Hoyo.

Un niño tarahumara tuvo la inspiración divina de nombrarlo Tohuí.

Entonces que se juntan el hambre con las ganas de comer, y para principio de 1982 Discos Gamma tuvo la genial ocurrencia de lanzar un single dedicado al nacimiento del tristemente célebre pandita con la interpretación ni más ni menos de Yuri, quien estrenaba su álbum “Llena de dulzura” y aunque ya se encontraba en los anaqueles de las tiendas de discos, hubo que literalmente parar las prensas para poder agregarle el tema recién salido de la nutrida inspiración de Laura Gómez Llanos.

La diquera quedó tan satisfecha con el resultado de un millón de discos vendidos gracias al pandita que la compositora tuvo la genial ocurrencia de proponer un álbum completo para Yuri con temas de su inspiración dedicados al pandita.

Los dioses aztecas estuvieron de nuestro lado y evitaron que dicho proyeco se concretara, ya que Yuri comenzaba a sobresalir como baladista juvenil y no le quedaban temas con cosas como “pequeño panda, aún no andas y ya queremos verte jugar con tu mamita que está orgullosa porque naciste en nuestra ciudad, en nuestro bosque maravilloso donde yo gozo y soy muy feliz”. ¡Qué horror!

Por aquélla época sonaban en la radio Yuri además del tema en cuestión con su “Maldita primavera”, José Luis Rodríguez “El Puma” con “Dueño de nada”, Luis Miguel con “Mentira” y “1 + 1 = 2 enamorados”, Menudo con “Súbete a mi moto”.

Al otro lado del charco trinfaban en la radio Survivor con “Eyes of the tiger”, The Stevie Miller Band con “Abracadabra”, Toto con “Rosanna” y Chicago nos decía “Hard to say I’m sorry”

Las telenovelas del momento eran “El derecho de nacer” con Verónica Castro, “Al final del arcoiris” con súper Olga Breeskin, “El amor nunca muere” con Christian Bach, y “Déjame vivir” con Daniela Romo.


jueves, 24 de junio de 2010

La primera playmate mexicana



Nota aclaratoria: Al final de este texto se encuentran fotos de desnudos de la personalidad de quien nos ocupamos en esta ocasión, las cuales podrían herir su sensibilidad, si es que aún les queda alguna. Véanlas bajo su propio riesgo y morbo. Por mi parte me deslindo de cualquier responsabilidad sobre cualquier impresión que dichas imágenes pudiesen ocasionar.

En 1977, Elizabeth Aguilar González había sido Señorita Estado de México y al haber sido vencida por Felicia Mercado Aguado en el Señorita México, le tocó representar a México en el Miss Mundo, donde logró colarse entre las 15 semifinalistas, además de que su actitud coquetona y cachonda, cautivó a la prensa desde su llegada al certámen.

Corría la primavera de 1984, y de pronto dejó el exitoso programa No empujen con Raúl Ástor y donde junto a Felicia Mercado, Elizabeth Dupeyrón y Alejandra Peniche, Elizabeth Aguilar formaba parte del tan popular “atractivo visual”, como cada jueves por la noche el conductor llamaba a las cuatro chicas.

Aunque bastante fresona para lo que vemos hoy en las pantallas televisivas, Elizabeth, además de ser una guapa morena tipo mestizo, era muy pispireta y literalmente seducía a la cámara.

Tales cualidades le bastaron para que le ofrecieran un atractivo contrato en los tan escasos dólares de entonces, para hacer historia dentro de las publicaciones para caballeros en México.

Elizabeth fue invitada a tener el privilegio de ser la primera playmate mexicana al mostrar al mundo, no sus carnes espléndidas, como diría García Márquez, pero sí abundantes para la revista Playboy, y en la edición de junio de 1984, engalanaba la portada, y adornaba sus páginas con su mestiza belleza y desde el ceterfold, que era el póster plegable que venía al centro de la revista, transmitía a los lectores su mirada seductora.

Pero no todo fue dulzura y sensualidad, ya que la flamante playmate azteca tuvo que enfrentar fuertes críticas y señalamientos no por parte de la prensa, quien le diera su incondicional apoyo, sino por parte de organizaciones religiosas quienes protestaron para que retiraran la publicación del mercado. ¿Les suena conocido el escándalo?

Si se arman de valor les invito a echarles un vistazo a las fotos, están muy bien logradas, y podemos darnos cuenta de que los prototipos de belleza van cambiando, y lo que ven ahí verdaderamente era un cuerpazo impresionante, era del tipo buenona, chichona, piernuda y nalgona, nada que ver con las anoréxicas de hoy, cuyos cuerpos muchas veces parecen sacados de National Geographic.

Recuerdo a Raúl Velasco escandalizado, declarando en su programa mientras la entrevistaba, que no entendía por qué se había atrevido a dejarse fotografiar “así”, pues jamás mencionó ante su público familar que en las fotos estaba desnuda, a lo que ella sin tapujos respondió que lo hacía primero por dinero, porque le habían pagado muy bien, y por la proyección que le daba el salir en la portada de una revista de tal nivel, pues ella soñaba con ser chica Bond.

Posteriormente grabaría un discazo que no tuvo éxito y le darían un programa que pasaba los domingos a las once de la noche que se llamaba Elizabeth en escena, donde hacía sketches cómicos con toque sensual, que hoy día matarían del aburrimiento a cualquiera. Se ve más en las telenovelas.

El programa solamente tuvo cuatro emisiones, lo que nos deja de manifiesto que no basta con un cuerpazo, ni con una fotogenia, sino el éxito lo da una extraña conjugación de una extraña serie de extraños factores.

Elizabeth Aguilar tuvo su momento, brilló y lo aprovechó. Con el paso del tiempo, tristemente comprobamos que no es recordada más que por haber sido la primera mujer mexicana que se atreviera a enseñarle el King Kong al conejito de Playboy.













lunes, 21 de junio de 2010

Solid Gold

A Graciela, por llegar a sus primeros 40

Antes de comenzar el viaje de hoy, los invito a todos los ochenteros para que esta vez se tomen el tiempo de ver los videos completos, de verdad que valen la pena.

Durante una buena parte de la década ochentera, los adolescentes de entonces teníamos una puntual cita cada sábado por la tarde para disfrutar por una hora del programa musical Solid Gold. (haz click aquí para ver entrada).

El programa comenzó a transmitirse exactamente en enero de 1980 haciendo un recuento de los éxitos de 1979 y tuvo varias etapas, marcadas por los cambios de conductores, entre los cuales estuvieron Dionne Warwick, Andy Gibb y en su última etapa, Marilyn McCoo, quien anteriormente lo había conducido por tres años.

La mecánica del programa era seniclla y novedosa para entonces, se hacía un countdown del Top 10 de canciones de la revista Radio & Records, que daba cuenta de los éxitos con más tocadas en la radio, a diferencia de Billboard que tenía su propio show del cual nos ocuparemos luego.

Se iban presentando fragmentos de las canciones acompañados con coreografías de los Solid Gold Dancers (haz click aquí para ver video).

A lo largo del programa se presentaban cinco o seis cantantes o grupos haciendo playback, pero el simple hecho de tener a tantas estrellas del momento en un solo programa era digno de aplaudirse.

Sus interpretaciones eran éxitos que se encontraban en el Top 10 de esa semana, como éste de Sheena Easton, ¿quién no lo recuerda? (haz click aquí para ver video).

También el programa contenía el Solid Gold Video, donde nos presentaban un video musical de algún éxito de la semana lo que dejaba apenas ver la punta de lo que sería un inmenso iceberg el cual, en tres décadas no deja de evolucionar.

Nada tiene que ver este video (haz click aquí), con este otro (haz click aquí). Sí, yo sé, está larguísimo pero es todo un concepto visual. Mejor no lo vean todo, sigan leyendo y pónganse a trabajar.

El programa cerraba con la Solid Gold Number One Song como era llamada la canción del primer lugar, y casi siempre presentaban a la estrella que la interpretaba.

Entre muchos otros, así pudimos ver a Culture Club con Time (clock of the heart) (haz click aquí para ver video), de su exitosísimo primer album Colours by numbers, y a una Olivia Newton-John muy ochentera interpretando Physical aeróbica y toda la cosa (haz click aquí para ver vídeo).

Así, el tema de conversación del lunes en la escuela era en gran parte el contendio de este programa.

¡Qué tiempos!

jueves, 17 de junio de 2010

Papachi, quiero ser cantante


Es por todo mundo conocido que el sexenio del difunto José López Portillo fue caracterizado por todo tipo de nepotismo y abuso de poder. Hablo de su vida, y no de su muerte.

Su hijo José Ramón, a quien llamaba “el orgullo de mi nepotismo”, fue nombrado subsecretario de Programación y Presupuesto (checa este artículo), su amiga Rosa Luz Alegría era asesora de la Presidencia y cuando se quiso deshacer de ella la convirtió en la primera mujer en ser nombrada Secretaria de Estado, asignándole Turismo, y Doña Carmen Romano se apoderaba del Festival Cervantino para ella y sus amistades exclusivamente.

Pues la nena de la casa, Paulina, no podía quedarse atrás, sólo que a ella la política no la movía tanto como la música, y se había dedicado a componer una docena de canciones de corte romántico que quería convertilas en éxito ¡siendo ella misma la intérprete!

Justo a principio de 1980 le dice a su “Papachi” como llamaba a su padre que quería ser cantante.

Y manos a la obra. Le encargaron el trabajo al talentoso Bebu Silvetti, y en los estudios de la Sociedad de Autores y Compositores de México grabaron Just, el que fuera su primer álbum, o LP, como se llamaba entonces a lo que hoy se conoce como CD, porque sí, hubo un segundo.

El disco contenía un total de diez temas de corte más que romántico, meloso, de súper hueva, con una voz que haría parecer a Patricia Manterola la Montserrat Caballé azteca.

De los diez temas, tres eran en inglés porque no había mejor oportunidad de presumir de que la hija presidencial era bilingüe. Dos de los temas en español fueron dedicados tiernamente a sus padres, Papachi y Mamá.

Los temas tenían letras tan profundas como “a veces el dolor calla, a veces el amor grita, a veces las heridas sanan, a veces la vida invita” y “recalling to my mind, warm arms, blue green eyes, strong hands, my first smile, my first pray, my first cry, my first day to school”.

El disco fue todo un éxito en ventas debido a que el gobierno compró todo el tiraje y lo regalaba en Conasupo en la compra de un litro de leche o algo así.

El primer y único sencillo fue Desilusión (haz click aquí para escuchar el tema) con el que todas las quinceañeras de secundaria suspiraban cuando se transmitía sin parar por la radio.

La osadía presidencial no paró ahí, y nos tuvieron que sacrificar a soportar un segundo álbum, titulado simplemente Paulina, y fue editado a fin de 1981, esta vez con diez temas orgullosamente en español, igualmente de su inspiración.

De este álbum se extrajeron dos éxitos radiales, Valores y Es posible oh amigo, e igual que el disco anterior, fue un éxito en ventas, esta vez para Discos y Cintas Melody, y también se obsequiaba de cortesía en las tiendas Conasupo.

Cabe mencionar que ambos discos tenían buena producción en cuanto a fotografía y diseño, cosa que antes no se acostumbraba, ya que el primero tenía una cubierta desdoblable con las letras incluídas en su interior, y el segundo dentro de la cubierta del disco, se incluía una funda con sendas fotos de la intéreprete presidencial y las letras de todos los temas.

Insisto, hablamos de 1980 y 1981, cuando eso no era frecuente, al menos en los discos producidos en México

Estas dos producciones históricas obran en mi poder, pero me es imposible revelar su paradero debido a cuestiones de seguridad, no vayan a caer ustedes en la tentación de poseerlas.

Carátulas tomadas prestadas de www.untiempopararecordar.com ¡Gracias un millón, Blitx!